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#Mito ou Verdade: Amamentação- Leite materno

#Mito o Verdad: Lactancia Materna - Leche materna

La percepción de una leche materna débil o insuficiente es un denominador común para muchas madres que amamantan. Debido a la falta de confianza en su capacidad para amamantar, muchas mujeres creen que tienen poca leche o que su leche es débil. La mayoría de las veces, esto no es más que una percepción errónea y suele ser reforzada por familiares y personas cercanas en respuesta al llanto del bebé.


Casi todas las mujeres pueden producir leche en una cantidad que excede las necesidades del bebé. Es posible que un bebé no obtenga lo suficiente, pero esto generalmente se debe a que no obtiene lo que necesita o no está siendo amamantado de manera efectiva. Rara vez está relacionado con problemas de producción.

El llanto “demasiado”, persistente o frecuente es, durante los primeros meses, un motivo que lleva a la madre a cuestionar la calidad de su leche. Muchos incluso empiezan a tomar suplementos o alimentos complementarios innecesarios.

El llanto es una forma de comunicación del bebé y es multifactorial. En realidad, una de sus causas puede ser el hambre. Hambre, por ejemplo, porque no puedes obtener fácilmente la leche que necesitas o porque estás pasando por un periodo en el que necesitas más, como ocurre durante los períodos de crecimiento acelerado.

A menudo, el bebé no puede obtener leche fácilmente debido a una alimentación ineficaz debido a una mala sujeción o una posición inadecuada sobre el pecho. Esto puede resultar en una mayor demanda por parte del bebé de tomas más frecuentes y/o más largas para obtener suficiente leche. En estos casos, la madre y el bebé necesitan ayuda para que los pechos se vacíen en cada toma.

Cuando un bebé está pasando por un período de crecimiento acelerado, parece tener más hambre durante unos días. Posiblemente esto se deba a que está creciendo más rápido que antes. Durante estos periodos, el bebé exige ser alimentado con más frecuencia, no porque la leche haya perdido calidad y ya no le sacia, sino porque sus necesidades han aumentado.

Es importante recalcar: siempre que surja cualquier duda, pregunta o inseguridad respecto a este tema, contactar con un profesional de la salud que pueda realizar una valoración y consecuente asesoramiento.

Enfermera Ana Patrícia Dias - Postgraduada en medicina neonatal y consejera en lactancia materna de UNICEF/OMS.

Esperamos que este artículo te haya ayudado, si tienes alguna duda o inquietud, puedes comunicarte con la Enfermera Ana Patricia Dias, a través de su Instagram. Aprovecha para seguir y seguir su página de Instagram @camomille.amormil.